Investigador, historiador, escritor
Por: Graciela Cruz Hernández
El 5 de febrero de 1896, en la ciudad de San Luis Potosí, S.L.P. nació Joaquín Philip Meade Saínz Trápaga, de ascendencia irlandesa por parte de su padre Gerardo Meade, nacido en Texas, y de ascendencia española por parte de su madre Joaquina Saínz Trápaga, fue Joaquín el tercer hijo de este matrimonio el cual contrajo nupcias en Tampico, Tamaulipas, lugar de nacimiento de la Sra. Joaquina.
Su educación primaria la llevó a cabo con maestros particulares. Aparte de sus clases elementales, cursó los estudios de inglés y francés, recibiendo también clases de violín, dominando también el piano, dibujo y pintura. En Kansas EUA., llevó el High School.
En 1910 la familia se fue a Londres, ahí Joaquín continuó estudiando. En 1912 regresó a México, estuvieron a punto de viajar en el Titanic, pero afortunadamente retrasaron unos días su viaje porque enfermó su hermana, embarcándose después en el Mauretania. Después de una breve estancia en México, volvió a Europa. Realizó entre 1915-1917 estudios de Derecho y Arquitectura en la Universidad de Oxford.
En 1918, en Londres, ingresó en el ejército inglés, habiendo llegado a subteniente. En 1920 pasó a España y fue cuando, con el sacerdote Jesús Carbayo, geólogo y prehistoriador, se instruyó en estas disciplinas naciendo en él el gusto por la arqueología.
Nuevamente en México, en ese mismo año de 1920, empezó sus investigaciones en el Archivo General de la Nación, investigaciones que alternaba con viajes a Tamaulipas, San Luis Potosí y Europa.
Fue también profesor en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.
En 1926 fue nombrado Camarero de Honor de Capa y Espada por el papa Pío XII.
El 26 de abril de 1930 contrajo matrimonio con Mercedes Esteva, con quien procreó tres hijos: Harold, Mercedes y Joaquín.
En 1933 se asentó en el Distrito Federal. Entonces se dio de lleno a la investigación, tanto en el Archivo General de la Nación como en los campos de la Huasteca.
En 1938 firmó un contrato con el Departamento de Monumentos Prehispánicos para realizar exploraciones, de manera especial en la región de la Huasteca; fue cuando descubrió las ruinas arqueológicas de Tamtoc, próximas al río Tamuín. De estas investigaciones envió escrupulosos informes a esa institución. Para entonces ya se había dado a conocer y relacionado con investigadores nacionales y extranjeros; especialmente con su amigo desde la infancia, el historiador Don Primo Feliciano Velázquez.
En agosto de 1939 en el XXVII Congreso de Americanistas, que se celebró en el Palacio de Bellas Artes, dio una conferencia sobre la Huasteca.
Tanto en documentos como en artículos o en ponencias daba a conocer los frutos de sus estudios históricos y arqueológicos.
En 1942 pasó a radicar en su tierra natal, en la Quinta Vista hermosa. La misma cuya construcción en 1917 su abuelo le había encomendado, ésta originalmente ocupó varias hectáreas, y la concluyó en 1921. Era tan grande que en la década de los cuarentas fraccionó el predio, del que salieron tres manzanas, y a la quinta la convirtió en hotel.
Joaquín Meade regresó definitivamente al Distrito Federal en 1947. Doce años después vendió lo que había sido la Quinta al Gobierno del Estado, quien confió a los arquitectos Francisco J. Cossío e Ignacio Algara la total remodelación. Hoy es la Casa de la Cultura de San Luis Potosí.
En la Ciudad de México continuó sus estudios y publicaciones. Por razones personales estuvo muy ligado a la Huasteca y a ella dedicó una gran parte de su producción impresa. Fue un arduo investigador, accediendo a los principales repositorios de la documentación potosina. Investigaba también en España, en los Estados Unidos; pero de manera especial en los archivos y bibliotecas de México y de San Luis Potosí. Además revisó muchas publicaciones periódicas, tanto de colecciones públicas como privadas. Con tan envidiable acervo, la mayoría de primera mano, su bibliografía es tan rica como original.
Sus conocimientos, prácticas y experiencias lo llevaron a escribir algunos libros: doce obras impresas y ocho inéditas. Entre las últimas se encuentra su monumental Diccionario histórico, geográfico y estadístico de San Luis Potosí y su Historia de la educación en San Luis Potosí, en varios tomos.
Autor de un gran número de artículos y conferencias, es importante destacar que todos sus artículos tenían el valor de la originalidad, aportando siempre nuevos datos. Rescató del olvido a personajes apenas conocidos o del todo desconocidos. Así formó un buen número de interesantes fotografías. Dentro del panorama de la historiografía potosina, Don Joaquín Meade dejó una obra que por sus fundamentos documentales, sirve de punto de partida para posteriores investigaciones. Prolífico en su producción, autor de diversos estudios sobre historia de San Luis Potosí y de la región huasteca (incluido Veracruz).
Perteneció a las sociedades mexicanas de Geografía y Estadística y de Antropología e Historia, así como a las academias Mexicana de la Historia, Potosina de Ciencias y Artes y a la Academy of American Franciscan History.
En 1960 empezó a sufrir el mal de Parkinson, sin que esto detuviera sus trabajos que prosiguió hasta sus últimos días, Joaquín Meade Saínz, murió en la Ciudad de México el 3 de julio de 1971.