Por: Graciela Cruz Hernández
Hoy rendiremos homenaje a una extraordinaria compositora que llevó el nombre de México por todo el mundo, nos referimos a María Joaquina de la Portilla Torres mejor conocida como María Grever, nacida el 14 de septiembre de 1885 en León, Guanajuato, hija de padre español y de madre mexicana.
María Grever estudió en el Colegio del Sagrado Corazón. Desde muy pequeña recibió educación musical, era una niña prodigio que dio muestras tempranas de su talento pues a los cuatro años con versos que ella misma escribió compuso un villancico navideño.
Cuando María tenía seis años su padre que era un acaudalado comerciante decidió llevarlos a Sevilla, España, donde contrató maestros particulares para que sus hijos estudiaran piano, inglés, francés e italiano. Su familia viajaba mucho y estaban por temporadas en Madrid, Londres y París en donde María estudió con Claude Debussy y Franz Lenhard, quien le sugirió que conservara su espontaneidad.
En España murió su padre por lo que la familia regresó a la capital de México, donde María estudió canto en la academia de su tía Refugio Torres cuando tenía 14 años.
En 1906, conoció a León Grever, con quien se casó un año después a la edad de 22 años. Su esposo era un alto ejecutivo petrolero y constructor del ferrocarril en la época porfirista. Cuando se casó, María Grever ya había terminado la carrera de concertista de piano, así como la de composición, armonía y orquestación.
María Grever tuvo dos hijas y un hijo, la menor murió cuando tenía apenas seis meses de edad, esa tragedia marcó para siempre la vida de María Grever y en memoria de su pequeña hija, le escribió la canción “Muñequita linda”.
En 1916 por la revolución mexicana se va con sus hijos a Nueva York. Por la situación política y la mala comunicación permanece sin saber nada de su marido por más de medio año, es entonces cuando María escribe: “Ya no te acuerdas de mí, ya no me quieres… Y por no hacerme sufrir, callar prefieres…”. Cuando llega León Grever a New York, la alegría vuelve al rostro de María.
A principios de la década de los veinte se dedicó al canto y grabó dos discos en los Estados Unidos, también trabajó para el cine con la Paramount y la 20th Century Fox, musicalizando varias películas.
Por esa época comienza a componer canciones, y su primer gran éxito llega cuando en 1926, María Grever conoció en Nueva York al tenor y estrella internacional de México José Mojica, quien grabó “Júrame”, canción que lanzaría a la fama mundial a María Grever cuando tenía 42 años, él fue su primer intérprete.
Algunas de sus canciones fueron grabadas por el cantante de ópera más famoso del mundo y quizá de la historia, Enrico Caruso.
María Grever fue la primera mexicana en ingresar en 1935 a la Sociedad Americana de Autores, Compositores y Editores de Música, también fue la primera compositora mexicana que logró fama internacional. Aunque estando en la cima del éxito sufrió una parálisis en 1948 al escuchar la interpretación de su canción “Vida mía”, en el Carnegie Hall de Nueva York, lo cual le emocionó tanto que le provocó una hemorragia cerebral que le causó una parálisis de su lado izquierdo, pero eso no la detuvo ya que en 1949 vino a México a realizar una serie de conciertos donde le fueron otorgadas las Llaves de la Ciudad de México, la Medalla al Mérito Cívico y la Medalla del Corazón de México. Trabajó como presentadora en la cadena de televisión XEW, contó su vida en la radio y escribió un libro autobiográfico.
María Grever, mujer de gran personalidad, cultura y dominio, fue la primera mujer en dirigir una orquesta de hombres, fue empresaria y fundó su propia editora musical, y además de compositora, pianista, cantante, fue publirrelacionista y promotora representante de artistas mexicanos en Nueva York.
Según el maestro Núñez Palacio (compositor orquestal), María Grever no sólo capturó el alma de la gente, sino que logró ensamblar perfectamente entre sí letras y músicas.
Esta maravillosa y talentosa mujer, María Grever, orgullo de nuestra identidad nacional mexicana murió el 15 de diciembre de 1951 en la ciudad de Nueva York. A petición suya, sus restos fueron llevados a la Ciudad de México, donde fue sepultada en el Panteón Español.
En 1952 la Unión de Mujeres de las Américas la nombró «Mujer de las Américas»
En 1953, Libertad Lamarque interpretó el papel María Grever en una película biográfica. (Cuando me vaya)
En Barcelona, España, hay una escuela de música con su nombre, y León, Guanajuato tiene una estatua de la compositora y un teatro con su nombre.
Sus canciones han sido grabadas por Luciano Pavaroti, Placido Domingo, Ray Conniff, Rod Stewart, Barry Manilow, Frank Sinatra, Javier Solís, Juan Arvizu, entre otros; además de ser interpretadas en los mundialmente conocidos conciertos de los tres tenores.
Algunas de sus canciones más conocidas son: “Cuando vuelva a tu lado”, “Júrame”, “Muñequita linda” (“Te quiero, dijiste”), “Alma mía”, “Despedida”, “Ya no me quieres”, “Por si no te vuelvo a ver”, “Vida mía”.
Por último aquí unas palabras que dijo María Grever estando en el extranjero:
“Tuve que dejar mi país y ahora, en Nueva York, estoy interesada en el jazz, en la música moderna, pero sobre todo, en la música mexicana que deseo presentarla a los estadounidenses. No creo que sepan mucho de ella. Valdría la pena darla a conocer. Existe una riqueza en la cultura de la canción en México, su origen hispano e indígena y la mezcla de ambos. Melodía y ritmo convergen ahí. Es mi deseo y ambición presentar las melodías y ritmos nativos en perspectiva real, pero con la flexibilidad necesaria para hacer una llamada al oído universal”
María Grever afirmaba que un compositor no debía despegarse nunca de sus raíces y ella con sus palabras y hechos lo confirmaba.