Por: Gustavo Novaro García
El 2 de noviembre de 2019, en sus vacaciones por el Día de Muertos, en su rancho, el presidente López escribió en sus redes sociales: «¡Qué equivocados están los conservadores y sus halcones! Pudieron cometer la felonía de derrocar y asesinar a Madero porque este hombre bueno, Apóstol de la Democracia, no supo, o las circunstancias no se lo permitieron, apoyarse en una base social que lo protegiera y lo respaldara.»
“Aquí no hay la más mínima oportunidad para los Huertas, los Francos, los Hitler o los Pinochet. El México de hoy no es tierra fértil para el genocidio ni para canallas que lo imploren”.
Y, en la conmemoración de El Día del Ejército que realizó en el Zócalo de la Ciudad de México el 19 de febrero, y ya no en donde se realizaba tradicionalmente en el Campo Marte externó en su discurso: “De modo que ese es el origen de la actual Ejército. Su historia, desde entonces, está llena de claroscuros. Es el Ejército que fundó Carranza, Francisco J. Múgica, Lucio Blanco y otros revolucionarios defensores, no sólo de la legalidad democrática, sino de causas justas. Es el Ejército del general Lázaro Cárdenas, del general Heriberto Jara, el Ejército del Escuadrón 201, pero también es el Ejército de Huitzilac, del 68 y de la fallida guerra contra el narcotráfico”.
Y agregó: “Doy gracias a los soldados y marinos, por no escuchar el canto de las sirenas y dar la espalda a la traición y al golpismo”. (Subrayado mío, GNG).
Que sepamos el único que ha manifestado que en México existe la posibilidad de un Golpe de Estado ha sido él, la pregunta es: ¿Existen bases reales para sustentar la creencia de López o es la fantasía de una persona paranoica? ¿Por qué la identificación con Madero?
Son preguntas que vamos a responder a continuación.
El último levantamiento armado que se recuerde fue el del general Saturnino Cedillo en 1938 en contra de la política cardenista, Cárdenas lo derrotó y Cedillo lo pagó con su vida. El que tuvo éxito fue el del grupo sonorense con el Plan de Agua Pietra, en contra de Venustiano Carranza, por querer imponer la candidatura presidencial de Ignacio Bonilla por sobre las aspiraciones de Álvaro Obregón, en 1920.
Así que va para un siglo que las fuerzas armadas se han mantenido leales al gobierno constituido legítimamente y desde 1940 todos los presidentes han concluido su mandato de seis años, algo único en el continente.
Resulta que en el discurso del 19 de febrero, López resaltó la figura no de Francisco sino la de su hermano Gustavo, a eso se le suma que el director del Fondo de Cultura Económica, para quien se modificó la ley para que pudiera ocupar el cargo, Paco Taibo II, en la presentación del libro de Ignacio Solares sobre el menos conocido de los Madero expresa que “revalorar al personaje es un acto de justicia y los adolescentes deberían saber más sobre él”.
Eso muestra que hay una línea oficial para identificar a López con el maderismo, para asociarlo así con las ideas democráticas y cuestionar lo que según Taibo II y López fueron las injustas críticas de la prensa hacia ese régimen, olvidando convenientemente a la Porra Maderista encabezada por Gustavo y a sus ataques físicos a los periódicos opositores de ese régimen, como El País de Trinidad Sánchez Santos.
Por otro lado, urge un estudio psicológico del ocupante de Palacio Nacional, ya que sus delirios persecutorios sumados a su megalomanía están provocando una desestabilización que nadie quiere.
Las palabras en redes sociales o en discursos oficiales sobre un posible golpe de Estado, por parte del titular del Poder Ejecutivo contribuyen a crear un clima de incertidumbre y preocupación, transmiten la sensación de un hombre acorralado e impotente frente a sus responsabilidades, o de alguien que definitivamente se está desconectando de la realidad y a que están sobrepasando sus sentimientos victimistas.
López juega al aprendiz de brujo, que no se le cumplan sus malos deseos.